Barrio Rawson, otoño, selva y gatos ( del ejercito de Cortazar)
Sombra, gatos, plantas y casitas soñadas, todo ese cóctel encontras en
el barrio Rawson, acunado entre los fondos del Club Comunicaciones y la
Facultad de Agronomía. En Villa del parque, Ciudad de Buenos
Aires.
Perdese en esta selva porteña, me estaría enamorando. |
A fines de la década del 20 el Banco Hipotecario Nacional dio
comienzo a lo que se denominó Barrio de Casas Baratas, que
comprendía una mezcla de casas individuales y bloques de departamentos de
planta baja y tres pisos. Su adquisición se concretaba por un singular sistema:
quienes deseaban alquilar pagaban mensualmente un monto determinado, y quienes
adquirían pagaban un monto muy similar, pero en carácter de cuota a cuenta del
precio total. Lo que hoy se llama leasing. Aun cuando ya mucha gente vivía
desde tiempo atrás, el barrio fue inaugurado oficialmente en febrero de
1934.
(fuente; www.barriorawson.com.ar)
Los gigantes de la sombra custodian la armonia barrial, los vericuetos de sus calles y su jungla en caos. |
Cada ventanita para mi es una historia, doy por descontado que allí los pisos son de parquet y seguro algún vecino tiene una mesa pata de moño. |
Baldomero Fernandez Moreno decía en los versos de setenta balcones y ninguna flor ; Si no aman las plantas no amarán el aire / no sabrán de música, de rimas, de amor / nunca se oirá un beso..., |
El barrio ha decidido entremezclar la selva porteña con el otoño más dorado,
es difícil caminar por las veredas sin sortear obstáculos, enredaderas en los
postes de luz, costillas de Adan exuberantes y un colchón de hojas donde se
amortiguan los feroces sonidos de la ciudad de la furia que vuelve arrancar
donde termina esta burbuja citadina, allá en Av San Martín.
Estos bloques de departamentos, que sumergen como patrones de la sombra custodian
la tranquilidad barrial entre Rosa chinas, orejas de elefante y un tanque de
agua adornado por una Santa Rita que escala y se muestra en magnitud.
Chalets de corte ingles con aleros de tejas y la imaginación servida para
que inventes cualquier historia se convierten en objeto de deseo de
personajes como yo que se vivencian, una cocina repleta de cacharros, una
biblioteca de pared a pared, un baño con piso damero y porque no, niños que después
de haber jugado a la rayuela meriendan con su tacita enlozada y su mantelito cuadrille.
Si le faltara un toque mágico a estas veredas porteñas es la presencia
de Julio Cortazar como habitante en la década del 30, quien vivió en el bloque
de la calle Artigas al 3246. ( Posteriormente allí se filmaron un montón de
series y películas)
Parece que los gatos lo saben, porque abundan y se adueñan del paisaje,
custodian al intruso desde umbrales , capot de autos y balcones.
Es como si les hubiera encomendado la misión de que la magia del lugar
siga allí por siempre…
Sospecho que Cortazar era un cacharrero de ley. Imagino su departamento
con vista a la plazoleta como rodeado de chirimbolos y talismanes.
“A las dos, cuando
la ola de los empleados termina de romper en los umbrales de tanta casa, Villa
del Parque se pone desierta y luminosa. Por Tinogasta y Zamudio bajó Clara
taconeando distintamente, saboreando un sol de noviembre roto por islas de
sombra que le tiraban a su paso los árboles de Agronomía. En la esquina de
Avenida San Martín y Nogoyá, mientras esperaba el ómnibus 168, oyó una batalla
de gorriones sobre su cabeza, y la torre florentina de San Juan María Vianney
le pareció más roja contra el cielo sin nubes, alto hasta dar
vértigo(…)”“Omnibus”, Bestiario (1951)
En este edificio vivió en los años 30s Julio Cortazar |
“Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos.” ( Rayuela) |
Sobre la calle Cortazar, ex Espinoza se encuentra este barcito soñado, ideal para una parada al sol, obviamente se llama Rayuela. |
Sobre Av San Martin, esta zingueria en un edificio de ensueño! |
Ese pedacito de la Ciudad es uno de mis preferidos, la Facultad de Agronomía,
me ha recibido en tardes con amigas
mate y mantita, me ha visto crecer y volver con hijas bici y picnic mientras
saludamos al tren amarillo ( Ferrocarril
Urquiza) que pasa por el medio del parque. He paseado con cámara en mano por
las Calles de Julio, queriendo vivir en cada casita, y siempre me robo un
gajito de algo de lo que anda jugando a la selva por ahí.
La magia de caminar al sol y con el tiempo en el bolsillo. |
Una vez por mes se instala una feria de productores en el predio de la
facultad donde se puede comprar, cosmética ecológica, verduras sin agro tóxicos,
plantas de las cátedras de la facultad, etc…
Hoy domingo de sol, saque fotos, salude a los gatos con respeto por las
dudas, me traje aromáticas y me volví en el 105 comiendo una hamburguesa
Vegana.
Las fotos fueron tomadas con celular, están al desnudo, sin filtro, con sol de frente...no me importo, la magia se instala por si sola sin forzar nada.
Textos y fotos; María Fernanda Perez ( Rosachina)
rosachinadeco@gmail .com
IG @rosachinadeco
Alguna vez fui estudiante..me fui del interior a donde tuve la dicha de regresar con el título bajo el brazo y vivo ahora ..pero recuerdo esas épocas donde sentía que la ciudad me tragaba y un día una amiga de bs as ,me llevo a conocer barrio rawson...simplemente me pase mis casi 10 años de vivir en la ciudad grande;yendo de visita cada vez que podía para sentirme un poco más en mi pueblo..y obvio rogándole a mis padres me alquilaran una de esas casitas (casonas)y no el dos ambientes donde vivía...a ese pedido jamás accedieron jajajaja (ilusa yo Jjaja)asique sólo iba de visita.Me hiciste recordarlo y hasta recuerdo alguna de esas fachadas..besos al por mayor
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